Navegamos para cruzar fronteras

jueves, 12 de abril de 2012

Hasta aquí llega el azahar....SEVILLA

¿SERÁ QUE ES PRIMAVERA?


Estamos ante  este anuncio, el que viene de TELUZ de Maracaibo.
Nos leemos, me leo y  re-desconozco lo que vendrá, asistida por el hoy con ayer inmediato  brisagrando el espíritu cada mañana.
Cuando aún cada miércoles o jueves venía Lieve “ DELANOY”, la maestra. Estaba deseando sacar eso que tenía que poner en la vida. La esperaba con harto material, era mi primer y único público, así dejé la silla de dirigir. Había entrado al espacio.
¿Cuánto podía esperar una directora? ¿Cuánto podía ocultar un rol?  Horas, doblemente siglos de pensar…
Con DELANOY, cuando cada galleta para reparar el corazón y cada café a mitad de jornada convertía la mañana en tarde conversada. Fue un largo invierno que terminó en primavera. Un invierno, donde tuvimos casi dos veranos, tres otoños y …¡una primavera! La misma primavera del 2010, cuando Sevilla se preparaba para La Feria, aquí en Mashara estuvimos de farales por la llegada de Maremar Unipersonal.
Nueva textura esta, la de la difusión que otros hacen de nuestro trabajo.
¿Se puede? ¿Se quiere? ¿Se pude y  quiere?
Con evangelio incorporado digo- “eran la cuatro de la tarde”.  Cuando las mujeres con zapatos sin terminar de estrenar, esas de las fronteras, esas de los campos ajenos, esas de casas u oficinas con maletas guardadas, esas que planchan en clandestinidad, se revelaron luego de una noche de lluvia extraña dejando los zapatitos niñas-niños rociando mis pies.
¿Me acercaba a lo que quería? Antes columna, antes mirada, antes raíz.
Las teresas cantan bellamente sobre mi pecho. ¿Ya es abril?
Cantos de siglos, palmas aleteando amores, así o asá, mientras este anuncio viene de un puerto. Sin embargo, una no es el viaje, también vale para: Uno no es el viaje, (me agota el uso del @).
Ya me gustaría ser el viaje.
Ya me gustaría ser la que transita siempre y siempre no existe para bien y para bienimal.

Por eso la MAR, que viene a mí y busco en bicicleta al extravío nocturno de mis pies,  piernas circulares de mi vieja afición  con la que bebo de rodillas las mañanas, espumeante oración en profundo gris iluminado de mi costa occidental. Donde AJUTAP, urdimbre, trama, travesía, se hacen parte del espíritu de los seres que crearon desde tiempo inmemoriales. Entonces un desea de azúcar aproxima a los que crean, que vuelven y amanecen, y estrellándose viven, y latiendo bajan y con miedo confían.  Desde abajo, desde los límites del recuerdo, desde el tiempo en que ya no recordamos y otros deben contar nuestros días antiguos, se abre la cabellera en vela, ligera y con estrellas, con redes para recoger de vos, de esto, de nuestro. Temblando de ilusión como el café removido por la conversa ahora con  Yajairas, Denis, Arnoldos, Erikas, Roggeres. Con paciencia de agua caliente de mate, siento la salida.
¿No vamos para el sur?
¿tampoco a oriente?
Elijo no estar en otras partes por ahora. Afirmaría que estoy en año PRIMAVERA.
¿Será que ya es feria?
Qué extraño es este azahar que me afiebra. ¿Es que el norte nos llama?
----
Jueves 12 de abril 2012
Hildy Quintanilla O.